Siglo XIII. El contexto atlántico
En el Archivo Nacional de París se halla la impronta en cera del sello del concejo de San Sebastián, adherida a un documento del año 1297. Representa el tipo de nave más importante en la Europa atlántica del siglo XIII, que permitió el inicio de la expansión de su comercio marítimo. Esta tipología naval era utilizada también por otros reinos con los que los vascos comerciaban, como ocurría especialmente con Inglaterra. Por otro lado, este tipo de embarcaciones fueron empleadas por los reinos cristianos en sus campañas militares, como en la conquista de Sevilla en 1248, en la que la participación de las naves vascas y cántabras fue determinante para forzar las defensas en el río Guadalquivir.
Sello de San Sebastián, de 1352. Archivo General de Navarra,
similar al del Archivo Nacional de París de 1297. © José Lopez
El barco representado en el tímpano del pórtico de la iglesia de
San Pedro de Olite muestra ciertas diferencias morfológicas con el de San Sebastián; se aprecia claramente que las tablas superiores del
casco no mueren en los branques, sino que se alzan para soportar
unos castillos integrados en el casco. Es muy probable que la tipología
de este barco tenga su origen en el Norte de Europa. © José Lopez
Miniatura francesa representando un navío de la época, de la
misma tipología que el de San Pedro de Olite. © José Lopez
Barcos abarloados, es decir, atracados unos junto a otros, en
un mismo muelle o en una ensenada. En esa época, San Sebastián
era una villa portuaria muy importante. Al pertenecer entonces al
reino de Navarra, fue dotada por el monarca Sancho VI El Sabio,
de leyes que constituyen uno de los códigos legales marítimos más
antiguos que se conocen, el fuero de 1180. La misma tipología se
empleaba para diferentes modelos de embarcaciones, variando
poco más que sus dimensiones. © José Lopez
La nave romana de Ostia muestra un perfil sorprendentemente
similar al de las naves del siglo XIII, al igual que las robustas y protuberantes
cabezas de los branques. Ello podría sugerir una continuidad
en el diseño naval desde la época romana hasta el siglo
XIII. © José Lopez
Escena de la Biblia de Pamplona, comisionada por Sancho El
Fuerte en 1194 y realizada por Petrus Ferrandus; manuscrito de Harburg-Oettinghen. © José Lopez
Algunos especialistas sugieren que el barco del sello de
Do-nostia podría tener unos 20 metros de eslora. En los siglos
siguientes este tipo de barco irá incorporando numerosas innovaciones,
adaptándose a las exigencias de cada época. © José Lopez
Los sellos denotan la utilización de una tipología naval común
a los puertos vascos, ingleses y cántabros. Baiona, como el resto de
Lapurdi pertenecía a Inglaterra, y era esta ciudad labortana uno de
los principales centros de construcción naval para la corona inglesa. © José Lopez
La nave del sello de San Sebastián muestra la popa y la proa
simétricas, el timón lateral a estribor, el casco de tingladillo y las
cabezas de los baos atravesando el casco. Está dotada de un alcázar
de popa que da cobijo al timonel, lo cual era muy conveniente
durante las navegaciones de altura. Además, su plataforma
elevada era de gran utilidad en los combates. © José Lopez