Las ferrerías de monte
16. El acarreo de carbón fue tarea primordial
en la elaboración del hierro artesanal.
Las primitivas instalaciones que se utilizaron para transformar el mineral
de hierro en metal en el País Vasco durante la época medieval
se conocen como
haizeolak o
agorrolak. Suelen denominarse también como
ferrerías de monte, porque ocupaban normalmente estos lugares, donde
el aprovisionamiento de las materias primas indispensables -carbón
vegetal y mineral- estaba garantizado y favorecía la rentabilidad de
la explotación.
13. Hogar de la ferrería Mirandaola, Legazpi.
La investigación en el País Vasco sobre estos primeros momentos
se halla poco desarrollada. Se conoce desde antiguo la presencia de grandes
escoriales en montes y zonas marginales, denominados habitualmente zepadis,
que se atribuyen a estos procesos. Ya Garibay y más tarde Isasti indican
que son los restos predecesores del método hidráulico:
"En algún
tiempo huvo herrerias en las montañas de Guipuzcoa, en que se labraba
el hierro con las manos sin el ingenio del agua".
15. En nuestros montes existen numerosos restos
de escoriales que delatan la existencia de antiguas ferrerías
de monte. Escorias de la haizeola Salobieta, Legazpi.
14. El bosque autóctono ha sido fuente
de materia prima para el carboneo.
19. Restos de una presa de madera, factura habitual
de los primeros azudes. Ferrería Goizarin, Artikutza.
Sin embargo, pocos son los datos claros y fidedignos con los que contamos acerca
de su exacta naturaleza. Como ya se ha puesto de relieve en otras ocasiones
(IBARRA, 1989), la descripción de sus elementos esenciales es muy similar -hornos
bajos alimentados de aire manualmente -, pero su caracterización varía -desde
hornos construidos, con dimensiones y aspectos muy variables, a simples hoyos
en el suelo, convenientemente sellados -. Pocas veces han sido objeto de análisis
arquelógicos, como los efectuados en los
zepadis de Oiola (Trapagaran,
Bizkaia), que han proporcionado interesantes pautas de interpretación
sobre los hornos, sistema de trabajo y metales obtenidos.
20. Horno de haizeola, o ferrería de monte,
según Manuel de Laborde del libro Ferrerías en Legazpi.
En cualquier caso, todo parece confirmar la idea de su escaso nivel técnico,
su variabilidad en la disposición y dimensiones del horno -quizá porque
pueden estar dando cuenta de un tipo de trabajo que se desarrolla a lo largo
de más de ocho o nueve siglos -, la precaria calidad del producto
obtenido -que exigiría arduas tareas de forja- y la limitada productividad
de las unidades de trabajo.
A pesar de la baja rentabilidad del sistema en términos modernos, la producción
en estos lugares siguió siendo importante y continuó siendo un
recurso aceptable durante la progresiva generalización de los mecanismos
hidráulicos para el beneficio y fabricación de hierro.
18. Escorias. Ferrería Zaralain. Legazpi.
22. Detalle de veta de mineral del coto de Aizpea
(Zerain).
17. Alzado de la ferrería de Agorregi.
Aia. Fachada Este.
21. Mineral de hierro.